Corea del Sur, conocida como los “Tigres de Asia”, afronta su preparación para la próxima Copa del Mundo con la confianza que le da haber asegurado su clasificación con anticipación. Bajo la dirección de Hong Myung-bo y el liderazgo de su capitán Heung-Min Son, la selección surcoreana mantiene un rendimiento destacado, especialmente en condición de local, donde solo ha sufrido una derrota en sus últimos diez compromisos. Su fortaleza ofensiva también ha sido un sello distintivo, con nueve goles convertidos en los últimos cinco encuentros internacionales. Este equilibrio entre solidez en casa y efectividad en ataque posiciona a Corea del Sur como una de las selecciones asiáticas más consistentes y ambiciosas rumbo al próximo desafío mundialista.
Brasil, la pentacampeona del mundo, afronta esta serie de amistosos con el objetivo de recuperar confianza tras unas eliminatorias decepcionantes en las que finalizó en la quinta posición, muy por debajo de las expectativas. Bajo la dirección del técnico italiano Carlo Ancelotti, la “Canarinha” busca reencontrar su mejor versión pese a las numerosas bajas que afectan su convocatoria, entre ellas las del guardameta Alisson y el extremo Raphinha, ambos fuera por lesión. En cuanto a rendimiento, el conjunto brasileño atraviesa un momento irregular, con apenas dos victorias en sus últimos cinco compromisos oficiales. Su principal preocupación radica en la falta de contundencia ofensiva, ya que solo ha logrado anotar cinco goles en ese mismo lapso, un registro que evidencia la necesidad de ajustes en la generación y definición de jugadas si pretende volver a dominar con la autoridad que históricamente lo ha caracterizado.
