El Brentford de Keith Andrews no ha tenido un arranque alentador en esta temporada, ya que apenas suma 4 puntos en 5 jornadas y se ubica en la 17ª posición de la tabla, demasiado cerca de la zona de descenso. El equipo presenta un registro modesto de 1 victoria, 1 empate y 3 derrotas, con un total de 6 goles marcados frente a 10 recibidos, lo que refleja tanto sus dificultades ofensivas como la fragilidad defensiva que lo ha caracterizado en este inicio. Pese a ello, los Bees han mostrado cierta fortaleza cuando juegan en casa, donde han logrado una victoria y un empate en sus dos presentaciones, evidenciando que su estadio puede ser un refugio clave para escapar de la presión. Sin embargo, el revés más reciente frente al Fulham por 1-3 como visitantes ha generado preocupación, ya que pone en evidencia la irregularidad del conjunto y la necesidad urgente de mejorar su rendimiento fuera de casa para no quedar atrapados en la lucha por la permanencia.
El Manchester United de Rúben Amorim atraviesa un inicio de campaña marcado por la irregularidad, acumulando 7 puntos en 5 partidos que lo sitúan en la 11ª posición de la tabla. El equipo presenta un balance de 2 victorias, 1 empate y 2 derrotas, con 6 goles a favor y 8 en contra, cifras que reflejan tanto la dificultad para mantener solidez defensiva como la falta de continuidad en ataque. A domicilio, los Red Devils todavía no han conseguido sumar de a tres, pues en sus dos compromisos fuera de casa solo registran un empate y una derrota, lo que evidencia un déficit que deberán corregir si quieren escalar posiciones. No obstante, el triunfo por 2-1 frente al Chelsea en Old Trafford ha supuesto un impulso anímico importante, generando confianza en el plantel y renovando la ilusión de sus aficionados de cara a los próximos desafíos de la temporada.